“En la Iglesia de San Juan Bautista de Mondragón, domingo a doce
días del mes de octubre del nacimiento de Nuestro Señor Jesucristo de mil e
quinientos diez y seis años, a hora de misa mayor, estando dentro de la dicha
iglesia el cabildo, curas, clérigos y beneficiados de ella, o la mayor parte de
ellos, e así mismo entrando en la dicha iglesia…Luis de Jáuregui, alcalde
ordinario de la dicha villa y su jurisdicción,… e todos los hombres y moradores
de ella, así hombres como mujeres, para oir la misa mayor conventual, todos de
una concordia et voluntad nomine discrepante, dijeron:
Que por
cuanto el día de Nuestra Señora de
Santa María de Septiembre próximo pasado en
la dicha villa había encendido muy grande fuego de tal manera que según por
experiencia de todo dicho pueblo había visto el grande fuego en tal manera que
fue necesario de sacar como hicieron a la dicha villa el cuerpo de Nuestro
Señor Jesuchristo del Santo Sagrario e así mismo la imagen de Nuestra Señora de
la Virgen María, no pudiendo matar ni dar cobro al dicho fuego los vecinos e
moradores de dicha villa, e habiéndose ya dedicado todos los vecinos e
moradores de la dicha villa a sacar sus haciendas, Nuestro Señor, por su piedad
e misericordia, milagrosamente usando de su misericordia con el dicho pueblo
había amatado e atajado el dicho fuego grande que así se había encendido en la
dicha villa.
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| Parrokiako Andra Mari, XVI |
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| Parrokiako Errosarioko Ama Birjina, XVI. |
Goian esan dudan moduan ohiturak 1918ra arte iraun zuen bizirik. “Para siempre jamás” hark, beraz, iraungitze data zeukan.Eta lehen Arrasateko bi historialariren izenak aipatu ditudala gogoratuz, orain beste batengana jo behar dut, Jose Mari Urangarengana, hain zuzen, berak idatzita baitira ondoko hitzak:
“Se
sacaban, además de la Virgen del Rosario, las de San Valerio y de San José, que
se bajaban de sus respectivas ermitas. Después de terminada la procesión y el
acto religioso de la tarde, estas dos imágenes de regreso a sus respectivas
ermitas se hacían un saludo de reverencia, muy cuidado por la numerosa concurrencia
de cofrades de ambas Cofradías y resto de fieles, delante de la puerta
principal de la Parroquia de San Juan Bautista, debajo de la torre. Consistía
en que los anderos delanteros hacían una ligera inclinación hacia adelante,
procurando que el
saludo saliera fijo y debidamente proporcionado. Los que
presenciaban la pugna solían estar al cuidado del menor descuido y salvo los
partidarios de cada uno, incondicionales favoritos de su imagen, el resto de la
gente aplaudía y abucheaba a los anderos que a su juicio hubiesen acertado o no
en la ejecución de su cometido. Una vez terminado el saludo, eran llevadas las imágenes
a sus respectivas ermitas. La banda de tamborileros y chistularis acompañaba a
la “vencedora”
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| Meatz Errekako San Valerixo |
1918an
amaitu zen Arrasateko prozesioa eta Arantzazurako erromeriak segitu zion, gaur
arte.
Argazkiak: JMVM, Arantza Cuesta
Argazkiak: JMVM, Arantza Cuesta
Gehiago prozesioari buruz:
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