Olarteko arkua |
Eraikin enblematikoen desagerpenaz kezkatuta dauden pertsonak beti izan
dira. Monumentuek eta, oro har, ibilgetu historikoak bost axola dietenen
tropela handiagoa bada ere, beren baitan
haietarako sentsibilitatea erakutsi dutenak ez dira gutxi izan. Aro guztietan
salatu dira eraikin eta bestelakoen txikizioak. Gaurko honetan Miguel
Madinabeitia zenari hartu diot 1892ko abuztuaren 10ean Noticiario Bilbaino
agerkarian sinatutakoa, “El ultimo vestigio” tituluarekin:
“Con el derribo que se ha hecho de la casa que forma travesía con la calle
de Ferrerías, de esta villa, denunciada hace tiempo por vieja y ruinosa, ha
desaparecido el último trozo de la muralla de formidable espesor, en el que
estaba incrustado un arco apuntado, que desde la plaza central bajaba o
daba salida a la ronda o arrabal llamado de Olarte.
Si ese arco hubiera amenazado ruina o su
demolición obedeciera a un proyecto de urbanización de aquella parte del
pueblo, y de consiguiente se hubiera
tratado de dar ensanche al callejón, yo
nada hubiera hablado ni escrito; pero como tengo la plena seguridad de que el
callejón quedará tan angosto y sombrío como antes, y que el derribo ha sido
premeditado y procurado por dos o tres que así les convenía, no puedo menos de
lamentar su arbitraria desaparición, porque como hijo amante de su pueblo
nativo, late todavía en mi pecho un átomo de sentimiento por el arte, por la
tradición y por la historia.
El ayuntamiento que se interesó por la
conservación de aquel paredón (excepción hecha de un individuo) acaso obligue a
levantar algo a quien corresponda; mas una vez despojada la labor de
originalidad que blasonaba, no tendrá ya mérito ninguno.
Olarteko kantoia, gaur |
Si hemos de creer a Garibay y si hemos de creer
una relación de documentos que existe en el archivo, en el paraje que hoy es
Mondragón había en el año 901, en cuya época Sancho Garcés I (1), Sancho Abarca
(2), rey de Navarra mandó cercar la puebla, fabricando para su defensa el
castillo en Arrasate, que es el montecillo conocido con el nombre de Santa
Bárbara. Cada día veo yo más claro esta afirmación porque todas las casas del
ala exterior de las calles Ferrerías e Iturrioz, igual que las de Gazteluondo
se edificaron sobre la muralla que converge perfectamente en el sitio donde el castillo
existió.
De más está decir que todas las casas se
levantaron con licencia del ayuntamiento y cuando había que abrir una ventana a
la muralla se otorgaba la licencia, reservándose el derecho de cerrarla cuando
conviniera. Luego es incuestionable que las murallas han sido y son propias y
pertenecen a la villa y nadie tiene derecho a derribarlas sin previa
autorización de la misma.
Si Sancho Abarca murió según unos historiadores en
925 y según otros en 926, puede asegurarse sin temor de ser desacertado que ese
paredón, al que yo por referencias digo Arco de Trajano, cuenta con una
antigüedad de más de novecientos años. El público ilustrado e imparcial dirá si
mi protesta es sincera o es vana palabrería”
Kantoiko ezkina hartan nire adinekook, 1892an bizirik geratu zen iturria ezagutu genuen.XX.aren bosgarren hamarkadaren amaieran desagertuk zen.
1892koaren ordez eraikitako etxea |
Aurreko zehazkizunen ondoren, Madinabeitiak izen berri bat emango digu:
Pedro Garrastegi. Arrasaten jaio zen, 1646an, eta Yucatango Meridan bizi izan
zen. Titulua Carlos IIak eman zion, eta Kondea izan aurretik Villanuevako bizkondea
izan zen. Madinabeitiak ongi zekien hori:
“La casa derribada a una con el arco, señalada con
el número 132 antiguo y moderno de la calle de Ferrerías, perteneció a D. Pedro
Garrastegui y Oleaga, maestre de Campo y conde de Miraflores. Fue hecho
Caballero de Santiago en el convento de San Agustín de esta villa, que está al
lado de su casa nativa de Zarugalde, el día 16 de abril de 1689, y en el de
1700 fue alcalde honorario de esta villa, residiendo en Nueva España.
El último poseedor de esta casa que la ha vendido a
cualquier precio ha sido D. Domingo de Elcoro y Aldecoa, dueño y
propietario de la casa solariega Domingotegui en el valle de Anguiozar,
barrio principal de la villa de Elgueta”
Azken parrafoan egiten duen baieztapena gogor
samarra iruditzen zait. Baina, ikusi ahal izan dugun bezala, Madinabeitia
halakoa zen. Ez zuen tintontzian burura zetorkiona uzten. Honetan amaitzera
banoa ere, Madinabeitiak ez zuen
artikulua horrela bukatu. Adabaki polita jarri zion idazkiari, baina horretaz beste
egun batean arituko gara.
(1) Iruñeko erregea izan zen 905 eta 925
bitartean.
(2) Madinabeitia
oker dabil, izan ere Sancho Garces IIari esaten zitzaion Santxo Abarka (Iruñeko erregea 970-994 tartean)
Arkuaren marrazkia: Zumalde
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